Cuando se habla de influencers, hay quien piensa que es una figura surgida con el auge de las redes sociales. Pero aunque sea un término con mucha popularidad actualmente, el influencer existe desde mediados del siglo XX.
Y es que influencer no es sólo el instagramer de moda del momento. Tradicionalmente, hemos visto en televisión u otros medios de comunicación a estrellas del deporte o de la música promocionando algún producto por buenas sumas de dinero. Lo que han propiciado las redes sociales es que la contratación de estas personas sea a bajo coste y con resultados de alcance muy alto.
Contar con personas destacadas como influencers o celebrities en las estrategias de marketing es una tendencia cada vez más afianzada entre las marcas. Y a diferencia de lo que muchas empresas creen, no es una técnica de branding y venta exclusiva para grandes marcas con altos presupuestos de marketing. Los influencers no son sólo famosos sino que también lo son expertos en un área muy concreta o gente muy relevante en redes sociales. En definitiva, son aquellas personas que dentro de las plataformas de social media tienen una gran influencia sobre otras: sus seguidores.
¿Qué ha provocado la consolidación de la figura del influencer en los planes de marketing?
Existen numerosos estudios que demuestran su poder de convicción ante los consumidores tanto es así que sus recomendaciones son tenidas en cuenta por estos en el momento de realizar una compra. Las opiniones importan y una valoración positiva en una red social pueden hacer que se le dé un pequeño empujón a aquel cliente que está indeciso a la hora de hacer una compra. En resumidas cuentas, lo que a una marca le lleva a querer realizar una estrategia con estos prescriptores son:
– Branding: crear y/o consolidad una imagen de marca, mejorando su reputación.
– Dar a conocer un nuevo producto o aumentar las ventas de alguno ya existente.
– Amplificar los mensajes de nuestra marca llegando a nuevas audiencias de interés para una marca y sus productos o servicios.
– Conseguir más comunidad en una plataforma social.
¿Qué debemos tener en cuenta para elegir a un buen embajador de nuestra marca?
Para empezar una colaboración con un influencer hay que tener en cuenta ciertas cuestiones previamente:
1. Elegir a una persona que destaque en el sector en el que opera tu producto, marca o servicio. No todos los influencers encajan con una marca determinada.
2. Analizar y estudiar sus cuentas en las distintas redes sociales. Es importante ver el engagement de sus fans en sus publicaciones. Por ejemplo, para determinar si un instagramer puede ser de interés para tu marca como influencer puedes aplicar la máxima del 4%. Es decir, divide el número de seguidores entre el número de likes y comentarios en los posts. Si la media como da resultados es superior a cuatro, estás ante un influencer.
3. Estudiar el potencial de audiencia que tiene el influencer en cuestión en un sector determinado.
La figura de un influencer te puede ayudar a promocionar un nuevo producto, lanzar una nueva marca o dar a conocer un evento. Recuerda, que tan sumamente importante es hacer una buena selección del prescriptor de tu marca como hacerle sentir especial y comunicarle tal y como es la campaña en la que quieres contar con su colaboración.